28.2.09

London Calling Parte I

Fue una tarde sin quehacer en el desierto cuando me puse a buscar en internet conciertos por venir. Como todo mundo andaba con que Radiohead y no se qué pues se me antojó ir a escuchar música en vivo a altos decibeles, que me pisotearan y empujaran, que la gente pusiera su celular en lo alto en vez de un encendedor con las rolas llegadoras, cantar en coro, ver gente chillar, espantarme con los altísimos precios de los recuerditos y todas esas cosas...



Un concierto... un concierto... un concierto... algo que me diera una dosis de euforia musical de la que genera brincoteo, manoteo y canto con la más explosiva energía, algo que pusiera mi cerebro de nuevo frente a la emoción de ver en vivo a una de esas bandas cuyas rolas te traen algún recuerdo chido o nostálgico...





De pronto encontré NME awards presents The Cure @ the O2 arena.





mmmm.... y si voy??



Ps por qué no!!

Me tomó tres días organizar todo... entradas, transporte, días libres en la chamba.... de hecho esa fue la parte más difícil. Organicé todo sin siquiera saber si tendría tiempo para ir a Londres sin faltar al trabajo y dejando la vida cotidiana botada a la mitad. Pero es que fue de esas veces que ps vale cacahuate la vida cotidiana. Y ahí estaba yo cuatro horas antes de que saliera el vuelo, todavía en mi casa, todavía sin empacar, con ropa secándose en la secadora, una torre enorme de trastes sin lavar, pensando en que mi boleto con 90% de descuento estaba sujeto a espacio y que aun no recibía el mensaje añorado que dijera "ok, lárgate... no trabajes, da el rol".


Ñáñaras totales.


De pronto que me llega el mensaje esperado, básicamente decía que esa persona haría mi trabajo por mí y como siempre es chido que alguien haga tu trabajo por ti adoré a la chica que se aceptó hacerlo... claro que a cambio yo haría el suyo jajaja. Entre 11 mil tuvo que ser Amanda, una canadiense de ojos azules enormes y pestañas kilométricas a la que recordé que ya había visto en vivo. Ya no tenía compromisos. Ahora el problema era que después del concierto apenas si tendría tiempo de llegar a tiempo a hacer el trabajo de Amanda.... Pero confío en la sincronía.


Empacar, agarrar papeles, dejar recados, cerrar las ventanas, dejar todo listo para la acción en cuanto volviera (de otro modo iba a terminar metida en un pedo de todos modos), dejar un desastre de demonio de tazmania por donde quiera que pasase y luego con lo forever que soy todavía me fui a despedir de mis vecinos y el buen Juan que me dice: "y si nos echamos un ron mientras te doy unos tips?" y que me siento en el sillón a tomarme la mezcla de alcohol con cocacola y que empieza Juan a bombardearme con preguntas. ¿Y dónde te vas a hospedar? ¿Y cómo vas a llegar al lugar donde es el concierto? Y cuando salgas del concierto... ¿cómo le harás para ir por tus cosas y llegar a tiempo al vuelo? Y yo con una cara de what?! impresionante....



Y es que... cuando me entra la prisa y la euforia por algo, no pienso claro. Bueno, en general no pienso claro pero así, menos!



Y él que es re experto en viajar y particularmente en Londres, me sacó un mapita del metro y me dijo donde estaban localizados mis puntos claves, entramos a hostelworld y buscamos los hostales más cercanos al O2, vimos los horarios de los trenes, las rutas alternas en caso de emergencia... vaya, planeamos mejor la estrategia. ¿Qué diablos haría yo sin gente así?






Volví a mi casa ya con el reloj encima pero también con más noción del viaje.


Mochila, maleta con rueditas, elevador, puerta de cristal, taxi esperando, dos africanas vestidas de colores ocupándolo, le llamo al taxista y contesta el wey que va manejando el taxi donde están las chavas, todos nos damos cuenta de que ése es mi taxi, nos reímos, las chicas multicromáticas se bajan, el taxista pone mi maleta en la cajuela, me subo, maneja, llegamos al aeropuerto...



Por cierto... el ron no me gustaba hasta que probé este, lo recomiendo mucho, se llama Captain Morgan, muy bueno! Sí es como que te vuelves pirata con pata de palo y te emborrachas en un barco en altamar y traes un perico en el hombro...





o habré estado muy ebria....

Febrero 2009

11.2.09

manchester

la cámara llegó sin pila.
nada de imágenes, sólo recuerdos.

hombres de más de 40, todos, con tatuajes en los brazos y manos. me pregunto por qué... alguna ola generacional que surgió antes de que yo naciera quizá.

manchester no me llamaba la atención pero hubo alguien que a larga distancia me puso una de esas inyecciones: larga distancia, larga duración.....
unos jeans, una playera de manga larga, una chamarra, unos tenis. el tren, boleto ida y vuelta (3 libras), 30 minutos aproximadamente, saliendo de la estación, la ciudad. caminata de tres minutos. picadilly es la estación en la que hay que bajarse para ver todo el rollo básico central de la ciudad.

en el camino se pueden ver muchísimas casas iguales: ladrillos, chimeneas, árboles sin hojas, cielo nublado, mary poppins pasando en su paraguas por ahí.
primeras impresiones: frío semicalante, muchas chicas de entre 18 y 22 con carreolas caras llevando bebes en ellas mientras ellas, como buenas madres adolescentes, se fuman un cigarro echando el humo sin pensarlo sobre el techo de la carreola, el bebé güerito duerme y aspira inconciente del mundo a su alrededor.

flyers anunciando toquines por doquier. aphex twin, carl graig, fat boy slim en un solo fin de semana. sankey's parece ser uno de los típicos recomendables en cuanto a música electrónica se refiere.

hay tres grupos inminentes: los de la generacion ochentas que lucen el atuendo pseudo punk electro emo; los típicos sobrios de abrigo, bufanda y botas altas con bolsa de debemhams en mano y los viejos retirados que caminan en las calles hacia un pub para tomar una cerveza.
en el pub todo se entremezcla. 7.69 libras: plato de parrillada con papa gigante, ensalada y cerveza (vaso enorme). la atmósfera es la de un pub de verdad.... la decoración es sobria, la gente es muy británica, hay espejos, cuadros ostentando fotos oscuras ligeramente iluminadas desde arriba, la alfombra es verde, el mobiliario de madera, la barra ostenta las más ricas cervezas, existe un protocolo así como en las cantinas del defe pero sin el escdándalo. aqui, en su lugar, reina un blof de acento inglés re mamón.
me tardo siglos en decidir así que pido la parrillada: todo o mejor nada. me tardo como hora y media en comer todo mientras platico con una de las herederas de la cultura británica. hablamos de festivales como glastonbury y de cómo en nuestra ciudad a nadie le importa eso y lo menosprecian diciendo que sólo los mugrosos van a esos eventos. también hablamos de la importancia de las perspectivas: salir de la burbuja es ampliar la perspectiva. se sufre, es verdad, la burbuja es un lugar feliz, pero.... la perspectiva puede volver felicidad cualquier circunstancia.

sigo caminando. angela toma su camino hacia el tren. se sube. pasan 35 minutos. ella perdida en el ipod registra que pasa demasiado tiempo. despierta. está en liverpool y no en manchester. tomó el tren en sentido contrario y se durmió. le toma tres horas llegar a su destino. originalmente eran 20 minutos. tomo nota: hay que fijarse bien en qué andén se está.

yo camino hacia primark. muchos hablan de esa tienda por sus ofertas. yo digo: "ay ay lo mío no es el shopping, ahorremos pounds" pero debo ver qué diablos es primark. bueno primark es un almacén lleno de cosas hechas por chinos explotados y vendidas a los turistas del reino unido y a sus residentes en precios aparentemente súper baratos pero no tan baratos como la mano de obra china. ropa, porquería innecesaria y media.... por ejemplo: un paraguas con estampado de nubecitas, unos lentes en forma de corazón, unos tenis plateados con rayas de colores fosforescentes. todo a precios tipo una libra, 0.90 libras, dos libras, 8 libras unas botas impactantemente inglesas.

pero también hay cosas necesarias. salí de ahí con toneladas de ropa interior. el espíritu "shoppingezco" del que carezco me orilló a ver por mis necesidades y en vez de comprar cosas pa lucir por fuera, compré calzones, tangas, brassieres, mallas de colores calcetines a rayas y tines monocromáticos por precios ridículos. todo lo que nunca compré en 24 años, lo compré en manchester.

si vas a manchester, haz una parada en primark. las bartijas más increíbles están ahí.

pero ahora bien. ¿qué más hay en manchester?

chester.
a chester se va por 25 libras ida y vuelta, una hora de camino. es un pueblo con muchísimas reminiscencias romanas y mucha vida cultural: conciertos, danza, el recorrido pa ver susodichas reminiscencias del imperio, arquitectura impresionante, mercados tradicionales y lugares para beber té.

el old tafford.
uno de los estadios con mayor aforo del mundo, 76.000 aficionados al fut (que en inglaterra... bueno.......). obvio la casa del Manchester United desde 1910. resulta carísimo ir a ver un partido, por suerte antes de llegar alguien me dijo que tengo descuento pero hoy no hay encuentro alguno. tiene un museo que cuenta la historia del estadio, que por cierto fue bombardeado en la segunda guerra mundial.
estoy tratando de pensar qué más vi en manchester pero.... el tiempo pasó demasiado rápido. el tren, el hotel, el aeropuerto otra vez.
Manchester, RU
Febrero 2009